Decir que las situaciones difíciles que nos ocurren en la vida son un castigo de Dios, es un error. Las lecturas de hoy son vivo ejemplo de que Jesús vino a sanar… no a castigar. ¿Aún no lo crees? Lee aquí...
¿Que San Josemaría Escrivá estuvo al borde de la muerte por su diabetes? Sí, y Dios lo salvó con la intercesión de la Virgen de Monserrate... ¡y luego hasta le curó la diabetes! Entérate aquí...